
En esta ocasión, nos volvieron a llamar para acudir a la gala, que se celebraba en la Filmoteca de Andalucía como el año anterior. Nos dijeron que nos iban a mandar por correo la entrada, para que pudiéramos acceder al lugar del acto. Y además íbamos a actuar, disfrazándonos y todo.
Se trataba de que uno de nosotros se convertiría en manzana... primero quiso hacerlo Yosu pero le costaba aprenderse el papel y eso que no había mucho que decir. El presentador no sabía nada y tampoco se podían saber sus preguntas ni sus posibles respuestas. Habría que improvisar sobre la marcha.
Cuando vi las dificultades que tenía para aprendérselo, les dije que quería hacerlo yo y así sucedió. Antes de salir, hasta nos llamaron para recordar lo del año anterior y bailar un poco para los presentes. Para mi sorpresa, esta vez nos llamaron artistas en vez de freakys, algo que agradezco por su parte.
Después de mucha espera, me tocó el turno a mí. El disfraz, al parecer, pertenecía a la empresa Sadeco (o eso nos dijeron). Como mangas eran dos gusanos muy graciosos que salían de la fruta, aunque para coger cosas como que no podía. Les pregunté sobre llevar micrófono:
-Ya te lo llevaremos, vete para allá, no te preocupes...

A todo el mundo le gustó la gala, como nuestra actuación en el escenario bailando. Mucha gente nos estuvieron animando para que siguiéramos adelante y no nos rindiéramos por nada.
El director de cortomanía, Fran Gómez (figura en la fotografía grande del enlace que hay más abajo... ver pie de foto), que fue quien nos llamó. Nos prometió que nos pagarían al menos 30 euros a cada uno por nuestra colaboración. Aún estamos esperando a que nos lo dé.
Incluso directores participantes del concurso de cortometrajes, que allí se celebraba. Nos dijo que contaría con nosotros para rodar uno, el próximo año.
¿Lo harán en esta ocasión o volverán a ser ante nosotros, gente de poca palabra?
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